17 de septiembre de 2011

Bienvenida 
 

             Se me ocurre que vas a llegar distinta 
             no exactamente más linda 
             ni más fuerte 
             ni más dócil 
             ni más cauta 
             tan sólo que vas a llegar distinta 
             como si esta temporada de no verme 
             te hubiera sorprendido a vos también 
             quizá porque sabes 
             cómo te pienso y te enumero 

             después de todo la nostalgia existe 
             aunque no lloremos en los andenes fantasmales 
             ni sobre las almohadas de candor 
             ni bajo el cielo opaco 

             yo nostalgio 
             tú nostalgias 
             y cómo me revienta que él nostalgie 

             tu rostro es la vanguardia 
             tal vez llega primero 
             porque lo pinto en las paredes 
             con trazos invisibles y seguros 

             no olvides que tu rostro 
             me mira como pueblo 
             sonríe y rabia y canta 
             como pueblo 
             y eso te da una lumbre 
             inapagable 

             ahora no tengo dudas 
             vas a llegar distinta y con señales 
             con nuevas 
             con hondura 
             con franqueza 
             sé que voy a quererte sin preguntas 
             sé que vas a quererme sin respuestas.
 
by Mario Benedetti
 

Tatita

No parecía tan extraño encontrarse con ciertos personajes en una ciudad tan pequeña como ésta. No habían pasado ni dos días desde que había llegado, para quedarme, cuando se aparecieron frente al cuartito de la pensión, un circo de estrellas fallidas de algún espectáculo desorientado en aquel lugar.
No, no hablo de payasos ni enanos barbones, ni mucho menos de mujeres sirenas; hablo de gente común y corriente, si es que no se les toma atención. Pero miremos: todos tenemos un artista dentro. Todos, menos el tata.